Menos mediático que su compañero Vinicius, la discreción de Rodrygo no está reñida con su efectividad y capacidad para aparecer en las grandes noches como la que se dibuja el martes contra el Manchester City en Champions.

Los aficionados del Real Madrid todavía recuerdan como sus goles en los minutos 90 y 90+1 arrebataron a los 'Citizens' su pase a la final europea hace dos temporadas.

Sus tantos abrieron el camino a la victoria en la prórroga de la vuelta de semifinales en el Santiago Bernabéu al Real Madrid, que luego ganaría su 14ª 'Orejona' en París contra el Liverpool.

Ahora, el equipo inglés vuelve a cruzarse en el camino del Real Madrid por tercera vez consecutiva ofreciendo una nueva oportunidad a Rodrygo para mostrarse en los momentos que más lo necesita su club.

El joven brasileño, de 23 años, llega al encuentro tras recuperar la puntería que parecía haber perdido desde su gol contra el Girona en febrero pasado en LaLiga, una sequía que pesaba sobre el antiguo jugador del Santos.

"Me han enseñado que si te dicen 'piensa en todos los animales menos el gato' solo piensas en el gato. A Rodrygo no le voy a hablar del gol. Nunca voy a hablar con él de los goles", explicaba hace unas semanas el técnico Carlo Ancelotti.

Brasil como revulsivo

El entrenador italiano mostraba así su apoyo e intentaba quitar presión al brasileño, que se enfundó la camiseta de su selección contra España para volver a encontrar el camino del gol.

El extremo merengue marcó uno de los tres goles en el amistoso contra el racismo que finalizó 3-3 en el Santiago Bernabéu el 26 de marzo.

Y sólo cinco días después, su doblete daba la victoria 2-0 al Real Madrid sobre el Athletic de Bilbao para alcanzar los quince goles en partidos oficiales esta temporada.

"Ha jugado muy bien, ha marcado la diferencia, ha podido marcar muy pronto, tiene una calidad muy alta en sus acciones, es lo que tiene que hacer", dijo tras ese triunfo Carlo Ancelotti.

"Es un gran delantero que a veces no acierta como ha acertado hoy, pero es algo normal", añadió para seguir quitando presión al joven brasileño.

La Champions es un escenario propicio para Rodrygo, que no sólo abrió el camino a la eliminación del City en 2022, sino que la temporada pasada también apeó al Chelsea con un doblete en Stamford Bridge en la vuelta de los cuartos de final del torneo continental.

Competición especial

"No sé cómo explicarlo. La Champions es una competición muy especial para mí, todas las veces que he jugado pude hacer algo para ayudar a mi equipo y estoy muy contento", dijo entonces el delantero brasileño.

El City se perfila como un desafío de entidad para seguir reinvindicándose mientras en alguna prensa empiezan a crecer las especulaciones sobre que podría ser el principal damnificado en caso de llegar Kylian Mbappé al equipo merengue la próxima temporada.

"No sé todavía lo de Mbappé, creo que está cerca por lo que todos dicen. Me fío de vosotros, pero tampoco sé lo que está pasando", dijo Rodrygo a la prensa tras el partido contra el Athletic.

Clubes, principalmente ingleses, podrían estar interesados en el brasileño, pero Rodrygo sólo muestra sus ganas de seguir vistiendo de blanco.

"Yo no pienso nada, sólo pienso estar centrado en esta temporada y terminar bien, con el máximo de títulos posibles. El próximo año creo que es un problema del míster, un buen problema, y yo estoy  tranquilo", concluyó.

Antes de pensar en la próxima temporada, el martes espera el Manchester City.