Por detrás en el marcador al descanso, el Eintracht Fráncfort logró remontar la semifinal de Copa de Alemania en cuatro minutos el miércoles en Stuttgart para imponerse 3-2 y unirse en la final al RB Leipzig, defensor del título.

El partido arrancó mal para el Eintracht, en caída libre en el campeonato, luego de que el portugués Tiago Tomás engañara a Kevin Trapp con un potente disparo ayudado por el poste (19).

Pero el paso por los vestuarios sentó mejor al Fráncfort, que empató rápido por obra del francés Evan Ndicka, asistido por su compatriota Randal Kolo Muani (51). Cuatro minutos más tarde, el internacional japonés Daichi Kamada superó a Fabian Bredlow para imponer la ventaja visitante en el marcador.

Los 47.500 asistentes en el estadio del Stuttgart empujaron a su equipo pero el Eintracht, vencedor de la Europa League en 2022, mantuvo el partido bajo su control. Gracias a un contrataque de Kamada, Kolo Muani obtuvo un penal que convirtió (75) para poner tierra de por medio en el marcador, alcanzando de paso los seis goles en Copa de Alemania y las 21 dianas entre todas las competiciones.

El gol de Enzo Millot (83) devolvió la esperanza al Stuttgart, y en el último minuto el árbitro no concedió un penal, que podría haber servido para empatar, tras consultar la asistencia de vídeo (VAR).

Polémica final

"Estoy muy feliz y orgulloso de mis chicos. ¡Muy felices por poder ir a Berlín!", declaró el entrenador del Eintracht, Oliver Glasner, a la televisión ARD.

En el lado contrario reinaba la desolación por esta eliminación en puertas del gran partido.

"La decepción es enorme", admitió el arquero del Stuttgart, Fabian Bredlow, que se quejó especialmente de esa última acción que pudo haber supuesto un penal a favor de los suyos y que el VAR no concedió.

"El balón dio claramente en el brazo" del jugador del Eintracht, estimó. "Con un poco de suerte, hubiéramos tenido el penal, para empatar 3-3 y haber ido a la prórroga", lamentó.

En el Olympiastadion de la capital, el Eintracht Fráncfort disputará su primera final de Copa desde su victoria en 2018 contra el Bayern Múnich (3-1). Su rival, el RB Leipzig, que derrotó al Friburgo el martes (5-1), disputará su cuarta final en cinco temporadas e intentará añadir su segundo título a su joven palmarés (club fundado en 2009).

Al Stuttgart, decimoquinto en la Bundesliga, le queda ahora evitar el descenso de categoría. Tiene los mismos puntos que el equipo que ocupa puesto de repechaje por la permanencia (Bochum, 16º), y apenas un punto más que el primer equipo en puestos de descenso directo (Schalke 04, 17º).